Después de tanta lucha, por fin he dado con el mayor de mis problemas, así que vamos a relatar la hazaña, por si a alguna persona más le es útil esta información. Toda la historia, después del salto.
Todo empezó, con unas circunstancias, que me obligaron a depender de la conexión a internet de mi iPhone. Es por esto que me era de vital importancia, la opción compartir internet. Entonces, un buen día, perdí la conexión a internet, quedando el iPhone “en estado catatónico” o, como algunos dirían, “tostado” y tuve que reiniciarlo y volver a conectarlo al Mac. El caso es que posteriormente a esa vez, el iPhone, no ofrecía conexión al ordenador, aunque en las siguientes a aquella no se quedaba bloqueado, sino que aparecía la banda azul superior y no desaparecía al desconectarlo además de no permitir el acceso a preferencias del iPhone. Probé a través de bluetooth y de cable y nada… Probé a eliminar las conexiones de red en preferencias del sistema de mi Mac y tampoco…
A partir de ese momento, empezó mi busqueda del problema. Lo primero que hice, fue realizar un duplicado de la MicroSIM de Movistar, ya que, casualmente, la zona donde vivo, tiene poca cobertura y, ya que, trasladando el equipo informático, funcionaba perfectamente todo. ¿¿Funcionaba perfectamente la función de compartir internet en mi Mac?? Sí, efectivamente, funcionaba. Y no era que llegase la conexión de ningún Wifi ni nada similar. Con el Airport desactivado en Mac Os y en iOs.
Lo siguiente, ya que, con dicho duplicado no hubo suerte, fue probar la conexión en otro ordenador. Un pc, con Windows 7. Entonces comprendí que el problema no residía en el iPhone, ya que era capaz de conectarme a internet con ese Windows 7 y mi iPhone. El mismo iPhone que se quedó tostado en mi Mac.
Pero, por si acaso, y para descartar posibles incompatibilidades de hardware (poco probable), me puse en contacto con Apple y, argumentando, que mi iPhone fallaba, accedieron a cambiarme el terminal (digno de mentar el increíble, increíble, increíble interés del personal de Apple por solucionar mi problema). Por tanto, ahora me encontraba con un iPhone 4 nuevo y el mismo ordenador. Obviamente lo actualicé, pero, por si el problema podía permanecer en la copia de seguridad de mi antiguo iPhone, decidí no cargar la copia de seguridad antigua. Pero héte aquí, ¡oh sorpresa!, ¡oh dolor!, ¡oh campos de soledad, mustios collados!, que al conectar la opción compartir internet, el navegador de mi Mac, no carga. Cabreo, rebote, enfado, maldichos…
Todo esto, me hizo eliminar de la cabeza, la idea de que el iPhone fuese el problema. Con lo cual empezó mi preocupacón, ya que llevo con el mismo sistema operativo, desde que compré el ordenador, salvo una reinstalación, por una metedura de pata, al poco de comprar dicho portátil. Esto quiere decir que, sobre el mismo sistema operativo Mac Os X Tiger, cargué un Mac Os X Leopard y, sobre éste último un Mac Os X Snow Leopard. Todo ello sin borrar datos y, aunque son muchos los que se sorprenden, funciona todo perfectamente. Esto quiere decir que tengo, a día de hoy, más de 150 aplicaciones, más las configuraciones de las mismas, más la configuración del sistema, etc., etc. Un dolor de cabeza si hubiese que borrar todo y empezar de cero. En este punto, reflexioné, y decidí instalar una copia de seguridad de Time Machine, del mes de Mayo, mes en el que aún no había salido a la venta el iPhone 4. Eso quitaría definitivamente los problemas si fueren del iPhone 4 o de la versión actual de iTunes.
No hubo éxito. Tras volver a la copia de seguridad de mayo, seguí con los problemas de conexión, por lo que volví a la copia de seguridad del día. Desde entonces fuí revisando poco a poco algunas opciones del sistema, navegando por foros, buscando en el soporte técnico de Apple, hasta que ví la luz. Quizá el problema fuese una simple aplicación… Abrí el monitor de actividad del sistema y lo dejé pelado de programas, quedando únicamente los procesos del root. ¡Eureka! ¡Hurra! ¡Funciona! Esto significa que es una aplicación de las que estaban funcionando en ese momento, por lo que fuí reiniciando la máquina, y, cada vez que reiniciaba, eliminaba una aplicación del arranque. Esto fué lo que me hizo dar con el problema: Dropbox. El hecho de que esta aplicación estuviese latente en mi Mac, fué el causante de que con mala conexión se bloquease el iPhone.
Después de esto, te quedas como un tonto, pues, ya podía haberme dado cuenta antes. Pero no, no siempre nos damos cuenta de las cosas, desde el primer momento. Lo que me deja tranquilo, es pensar que, con la de gente que me ha ayudado, para intentar solucionar esto, a nadie se le ha ocurrido nada que pudiese darme una pista del problema.
Sólo espero que, si alguien tiene el mismo problema, esto le sirva de ayuda y que se ahorre todos los pasos que yo he tenido que seguir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario