Hace justo una semana empezó el revuelo de la filtración del iPhone 4G, pero todavía somos muchos los que nos preguntamos cómo una empresa como Apple, que siempre juega con el factor sorpresa en sus presentaciones, puede haberse permitido el lujo de haber perdido un prototipo tan valioso.
Ya no cabe duda de que éste va a ser el futuro iPhone 4G (o uno muy similar), pero ¿por qué falló la seguridad de Apple? ¿Por qué Apple se arriesga a prestar prototipos a sus empleados si estos pueden “desaparecer” de la noche a la mañana?
Dos teorías conspirativas circulan estos días por la red:
1. Que se trate de una nueva estrategia de marketing totalmente innovativa por parte de Apple. La empresa pretende con esta filtración que los usuarios crean que este será el nuevo modelo y sorprender con algo totalmente distinto el próximo mes de junio.
2. Una historia muy bien montada por Gizmodo para ganar un mayor número de visitantes y poder aumentar así los ingresos por la publicidad. El supuesto escrito mandado por Apple no podría ser más que una falsificación realizada con Photoshop.
Pero luego está la tercera vía y que, en mi opinión, es la más lógica al final de toda esta historia: que haya sido una gran metedura de pata por parte de Apple (eso sí, para el mes de junio no ha perdido expectación porque estaremos todos ansiosos de saber si presentan el mismo iPhone 4G encontrado).
A esta tercera opción se llega por un descarte de las dos anteriores: en primer lugar parece ser que la policía puede estar realizando una investigación del asunto y en segundo lugar, si fuese una historia inventada por Gizmodo, la web caería en picado por perder toda la credibilidad.
Y vosotros, ¿qué opináis?
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